
Esta receta está pensada para quienes buscan una sopa reconfortante y con el auténtico sabor del mar. Perfecta para disfrutarla como plato principal, reúne mariscos frescos y fideos en un caldo aromático que transporta a los pequeños puertos pesqueros del Mediterráneo.
Personalmente, siempre que preparo esta sopa, evoca recuerdos de reuniones familiares en la costa y me encanta lo rápido que desaparece de la mesa.
Ingredientes
- Cabeza y espinas de pescado blanco: Aportan cuerpo y sabor profundo al caldo. Elige pescado fresco y de carne blanca como la merluza o el rape.
- 1 litro de agua: Base imprescindible para el fumet.
- 1 hoja de laurel: Perfuma sutilmente el caldo, elige hojas verdes y aromáticas.
- Sal al gusto: Realza el sabor, ajusta durante la cocción.
- 150 g de fideos finos: Los clásicos para sopas marineras, procura que sean de buena calidad y revisa el punto de cocción.
- 150 g de gambas: Dan dulzura y textura, usa gambas frescas o congeladas bien peladas.
- 150 g de mejillones: Sueltan jugos marinos al cocer; pide que estén bien cerrados y limpios.
- 1 cebolla pequeña, picada: Base aromática del sofrito, mejor si es dulce o tierna.
- 1 tomate maduro, pelado y triturado: Añade frescura y acidez equilibrada; elige tomates en su punto para mejor resultado.
- 2 dientes de ajo, picados: Intensifican el aroma, usa ajos firmes y sin brotes.
- 1 sobrecito de azafrán (o cúrcuma como alternativa): Azafrán aporta color y aroma inconfundibles; la cúrcuma funciona bien como opción más económica.
- 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra: Sofríe ingredientes y suma matices, siempre apuesta por un virgen extra de sabor intenso.
- Sal y pimienta al gusto: Ajustan el equilibrio final del plato, prueba y corrige antes de servir.
Instrucciones paso a paso
- Preparación del fumet:
- Hierve la cabeza y las espinas de pescado blanco con la hoja de laurel y una pizca de sal en un litro de agua. Mantén la ebullición suave durante unos veinte minutos para extraer todos los matices. Luego cuela el caldo cuidadosamente y resérvalo.
- Sofrito de la base:
- En una cazuela grande, calienta el aceite de oliva y sofríe la cebolla y el ajo picados, removiendo para que no se doren demasiado. Incorpora el tomate triturado y deja cocer a fuego medio durante cinco minutos hasta que reduzca el líquido.
- Incorporación del marisco:
- Añade al sofrito el caldo colado. Incorpora las gambas peladas y los mejillones bien limpios. Cocina a fuego suave durante otros cinco minutos. Los mejillones deben abrirse y las gambas cambiar de color rápidamente.
- Añadir los fideos y el azafrán:
- Agrega los fideos finos y el azafrán (o la cúrcuma). Remueve suavemente y cuece a fuego medio, siguiendo el tiempo recomendado en el envase de los fideos, que suele estar entre cinco y siete minutos. Es importante vigilar para que no se pasen y queden al dente.
- Toque final y presentación:
- Prueba y rectifica de sal y pimienta. Sirve la sopa bien caliente, con un poco de perejil fresco espolvoreado por encima si lo deseas para darle un toque de color y frescura.

De mis ingredientes favoritos, el azafrán siempre destaca por su aroma y el color dorado que aporta a la sopa; para mí, su inconfundible fragancia hace toda la diferencia. Recuerdo la primera vez que lo usé en una receta familiar y cómo cambió por completo la experiencia.
Consejos para conservar la sopa
Guarda la sopa en un recipiente hermético en la nevera durante un máximo de dos días. Si la preparas con antelación, añade los fideos justo al recalentar para que no se reblandezcan demasiado. Evita congelar los fideos ya cocidos, pero el caldo y el sofrito sí pueden congelarse sin problemas.
Sustituciones de ingredientes
Puedes usar fumet envasado si tienes prisa o caldo de verduras suave para una versión más ligera. Sustituye las gambas o mejillones por calamares o almejas según la disponibilidad o preferencias. Si buscas opciones económicas, la merluza congelada o los paquetes mixtos de mariscos son una buena alternativa.
Sugerencias para servir
Acompaña la sopa con pan tostado untado en alioli para sumar tradición y sabor. Es perfecta como primer plato de una comida especial, o como cena ligera con una ensalada verde. Se puede decorar con un chorrito de aceite de oliva virgen extra y unas hebras de azafrán para realzar la presentación.

Preparar una buena sopa marinera en casa se convierte en un ritual lleno de aromas que reconfortan y evocan el encanto de la costa. Es uno de esos platos sencillos, generosos y que nunca pasan de moda.
Preguntas frecuentes sobre recetas
- → ¿Puedo sustituir los mejillones por otro marisco?
Sí, puedes emplear almejas, calamares o incluso añadir trozos de pescado blanco para variar el sabor y la textura.
- → ¿Cuánto tiempo deben cocerse los fideos finos?
Normalmente requieren entre 5 y 7 minutos de cocción; revisa el paquete para un resultado perfecto al dente.
- → ¿Cómo lograr que la sopa tenga más sabor?
El fumet casero es clave. Puedes añadir unas cabezas extra de gambas o pescado para intensificar el sabor del caldo.
- → ¿Se puede preparar con antelación?
La base de la sopa sí, pero es recomendable cocer los fideos justo antes de servir para que no se pasen.
- → ¿Es adecuada para dietas sin gluten?
Puedes sustituir los fideos tradicionales por fideos sin gluten y disfrutarla sin preocupaciones.