
Este guiso de verano con tomates y alubias blancas es perfecto para aprovechar los tomates maduros de temporada. La combinación de alubias cremosas con vegetales frescos crea una comida ligera pero reconfortante que es ideal para las noches de verano cuando quieres algo sustancioso sin sentirte pesado.
La primera vez que preparé este guiso fue durante una abundante cosecha de tomates de mi pequeño huerto urbano. Desde entonces se ha convertido en nuestra salvación cuando los tomates maduran todos a la vez y necesitamos una receta que realmente resalte su sabor natural.
Ingredientes
- Aceite de oliva virgen extra: aporta un sabor mediterráneo auténtico busca uno de calidad para mejores resultados
- Cebolla y ajo: forman la base aromática del guiso intenta picarlos finamente para que se integren bien
- Pimiento rojo: añade dulzura y color elige uno firme y brillante
- Calabacín: aporta textura y frescura selecciona uno pequeño y firme para mejor sabor
- Tomates maduros: son el alma de este plato cuanto más maduros y aromáticos mejor
- Tomates cherry: aportan explosiones de dulzura intenta conseguir variedades diferentes para más interés
- Alubias blancas: aportan cremosidad y proteína enjuágalas bien para eliminar el exceso de sodio
- Caldo vegetal: proporciona profundidad si es casero mejor pero uno de buena calidad comercial funciona bien
- Pasta de tomate: concentra el sabor busca una sin aditivos
- Zumo de limón: equilibra la acidez elige un limón fresco y jugoso
- Pimentón ahumado: aporta complejidad compra uno de buena calidad para mejor sabor
- Hierbas frescas: realzan todos los sabores crecen fácilmente en casa incluso en una ventana
Instrucciones Paso a Paso
- Preparación de la base aromática:
- Calienta el aceite de oliva en una olla grande a fuego medio y sofríe la cebolla durante 5 minutos hasta que esté transparente y suave sin que llegue a dorarse. Este paso establece el fondo aromático de todo el guiso.
- Incorporación de las verduras:
- Añade el ajo el pimiento y el calabacín. Cocina durante otros 5 a 6 minutos removiendo ocasionalmente hasta que las verduras estén ligeramente tiernas. Es importante no cocinarlas demasiado en esta etapa ya que seguirán cocinándose.
- Intensificación de sabores:
- Incorpora la pasta de tomate el pimentón ahumado las hojuelas de chile si las usas y el orégano. Cocina por 1 minuto removiendo constantemente. Este breve cocinado despierta los aceites esenciales de las especias y carameliza ligeramente la pasta de tomate.
- Unificación de ingredientes:
- Agrega los tomates picados los tomates cherry las alubias blancas y el caldo vegetal. Lleva a ebullición suave. Este es el momento en que todos los sabores comienzan a mezclarse y crear la complejidad del guiso.
- Cocción lenta:
- Tapa y cocina a fuego lento durante 20 minutos removiendo ocasionalmente hasta que las verduras estén tiernas y el guiso haya espesado ligeramente. La cocción lenta permite que los sabores se desarrollen plenamente y se integren.
- Finalización y ajuste:
- Incorpora el zumo de limón y las hierbas frescas. Sazona con sal y pimienta al gusto. Los toques finales de acidez y frescura de las hierbas elevan todos los sabores y equilibran la riqueza del guiso.

Siempre me aseguro de tener un buen pan crujiente para acompañar este guiso. Mi momento favorito con esta receta fue durante una cena al aire libre en el jardín con amigos cuando todos quedaron sorprendidos por cómo algo tan simple podía tener tanto sabor. El secreto está en la calidad de los tomates y en tomarse el tiempo para desarrollar cada capa de sabor.
Consejos de Almacenamiento
Este guiso se conserva perfectamente en el refrigerador hasta 4 días mejorando incluso su sabor al día siguiente cuando los ingredientes han tenido tiempo de mezclarse. Para almacenarlo déjalo enfriar completamente antes de guardarlo en un recipiente hermético. Si quieres conservarlo por más tiempo se congela muy bien durante hasta 3 meses. Simplemente descongélalo en el refrigerador durante la noche y recaliéntalo suavemente añadiendo un poco más de caldo si fuera necesario para ajustar la consistencia.
Sustituciones de Ingredientes
Si no tienes calabacín puedes sustituirlo por berenjenas o incluso calabaza dependiendo de la temporada. Las alubias blancas pueden reemplazarse por garbanzos o incluso lentejas aunque la textura cambiará. Para una versión no vegana puedes añadir chorizo suave al principio con la cebolla o terminar el plato con un huevo pochado por encima lo que aporta una cremosidad adicional. Los tomates enlatados funcionan perfectamente fuera de temporada simplemente busca tomates enteros de buena calidad y tritúralos con las manos para una textura más rústica.

Sugerencias para Servir
Este guiso es increíblemente versátil. Sírvelo caliente con pan de masa madre para una cena reconfortante o a temperatura ambiente como parte de un buffet veraniego. Funciona maravillosamente sobre una base de quinoa bulgur o cuscús para una comida más sustanciosa. Para una presentación elegante vierte el guiso en cuencos individuales añade un chorrito de aceite de oliva de buena calidad por encima unas hojas de albahaca fresca y virutas de queso parmesano o vegano si mantienes la receta vegana. También puedes servirlo como acompañamiento de pescado a la plancha.
Preguntas y respuestas sobre la receta
- → ¿Puedo preparar este estofado con anticipación?
¡Absolutamente! Este estofado mejora su sabor al reposar. Puedes prepararlo con hasta 2 días de antelación y conservarlo en la nevera. Los sabores se intensificarán con el tiempo.
- → ¿Qué puedo usar si no tengo tomates frescos maduros?
Si no dispones de tomates frescos maduros, puedes sustituirlos por una lata de tomates enteros o troceados (400g). Los tomates en conserva funcionan muy bien en este plato.
- → ¿Es posible congelar este estofado?
Sí, este estofado se congela perfectamente. Guárdalo en recipientes herméticos y podrás conservarlo hasta 3 meses. Descongela en la nevera durante la noche y recalienta suavemente a fuego medio.
- → ¿Qué otras legumbres puedo usar en lugar de alubias blancas?
Puedes sustituir las alubias blancas por garbanzos, alubias pintas o incluso lentejas. Cada variedad aportará una textura y sabor ligeramente diferentes pero igualmente deliciosos.
- → ¿Cómo puedo hacer este estofado más sustancioso?
Para convertirlo en un plato más contundente, puedes añadir 150g de pasta corta, 100g de arroz o 250g de patatas en cubos cuando añadas el caldo. Ajusta la cantidad de líquido según sea necesario añadiendo más caldo.
- → ¿Qué hierbas frescas complementan mejor este plato?
Además del albahaca y perejil, el estofado queda delicioso con otras hierbas mediterráneas como tomillo, romero o menta. Una combinación de hierbas frescas picadas al final realza los sabores veraniegos del plato.