
Este salmorejo versionado con durazno a la parrilla y crujiente de jamón serrano transforma el clásico andaluz en una experiencia única para los días calurosos Siendo una sopa fría de tomate fácil y elegante resulta perfecta para compartir en verano Mi familia la pide en cada reunión y siempre sorprende como entrada original
Recuerdo la primera vez que preparé esta versión en una tarde de julio quedó tan colorida y cremosa que repitieron todos y hasta pidieron la receta para hacerla en casa
Ingredientes
- Tomates maduros: dan el sabor principal busca que sean rojos y pesados para más jugo y dulzor
- Pan del día anterior: aporta textura cremosa mejor si usas uno de miga densa y sin corteza para evitar que amargue
- Ajo fresco: realza todos los sabores elige dientes grandes y sin brotes
- Aceite de oliva virgen extra: fundamental para la suavidad usa uno de sabor afrutado y de primera presión en frío
- Sal: necesaria para equilibrar la acidez de los tomates añade de a poco y ajusta al gusto
- Duraznos frescos: su dulzura contrasta perfecto al grill quedan aún mejores elige los que ceden ligeramente al tacto pero no estén blandos
- Jamón serrano: en lonchas finas aporta crocante y un extra de umami prefiere el que tiene grasa visible para mejor textura
Instrucciones Paso a Paso
- Preparar los ingredientes principales:
- Lava bien los tomates sécalos y córtalos en cuartos Si tienen piel gruesa puedes pelarlos antes Elimina el pedúnculo y reserva
- Remojar el pan:
- Corta el pan en trozos y colócalo en un bol grande Añade los tomates cortados encima y deja reposar unos quince minutos para que el pan absorba bien los jugos
- Procesar la mezcla:
- Coloca el pan y los tomates remojados en un vaso de batidora Añade el ajo pelado y una pizca inicial de sal Tritura a baja velocidad hasta lograr una pasta bastante fina y sin trozos visibles
- Emulsionar con aceite:
- Con la batidora en marcha vierte el aceite de oliva en hilo fino Sube la velocidad y bate hasta que la mezcla quede sedosa y aireada Probé varias proporciones y con unos cien mililitros por kilo de tomates se logra justo el punto cremoso
- Salpimentar y enfriar:
- Prueba la crema añade más sal si es necesario y guarda al menos dos horas en la nevera para que se asienten los sabores
- Parrillar los duraznos:
- Mientras reposa el salmorejo corta los duraznos en gajos gruesos Calienta la parrilla o sartén y dóralos un minuto por lado hasta que se caramelicen ligerísimamente Hay que vigilarlos para que no se ablanden demasiado
- Preparar el jamón serrano crujiente:
- Dispón las lonchas sobre papel vegetal y tuéstalas en horno bien caliente por cinco a siete minutos o hasta que estén secas y crujientes Deja enfriar y parte en trozos pequeños Al enfriarse endurecen así que no retires antes de tiempo
- Montar y servir:
- Sirve el salmorejo muy frío en boles pequeños Añade encima gajos de durazno tibio y termina con trocitos de crujiente de jamón Puedes añadir un hilo de aceite de oliva y un poco de pan tostado si quieres sumar textura

Mi parte favorita es preparar el jamón crujiente que perfuma toda la cocina y me recuerda celebraciones alegres en la mesa de mis abuelos donde nunca faltaba un toque especial
Consejos para Conservar
Guarda el salmorejo en frascos individuales para servir de manera rápida y mantener la frescura Se puede guardar hasta dos días en el refrigerador Si ves separación de líquidos solo bate enérgicamente antes de servir El jamón y los duraznos guárdalos por separado y monta justo antes de salir a la mesa
Sustituciones Útiles
Si no consigues duraznos puedes probar con nectarinas o incluso mango a la parrilla para un giro diferente El pan sin gluten funciona muy bien si algún invitado lo necesita Para versión vegetariana omite el jamón y añade almendras tostadas

Cómo Servirlo Mejor
Una pizca extra de ajo en polvo potencia el sabor si buscas algo más picante Sirve en vasitos pequeños como aperitivo o en un banquete de verano acompañado de ensalada verde y vino blanco bien frío En casa lo acompañamos a menudo con pan crujiente artesanal para mojar y repetir
Un Poco de Historia
El salmorejo proviene de Córdoba y nació como plato humilde Su base es pan agua tomate y ajo Lo de los ingredientes modernos como jamón o huevo duro se sumó mucho después Esta versión con fruta asada rinde homenaje a la costumbre andaluza de mezclar dulce y salado en fiestas y verbenas familiares
Preguntas y respuestas sobre la receta
- → ¿Qué tipo de pan funciona mejor en el salmorejo?
El pan blanco del día anterior, preferiblemente sin corteza, aporta la cremosidad tradicional al salmorejo.
- → ¿Puedo sustituir el jamón serrano?
Sí, puedes utilizar jamón ibérico o, para una versión sin carne, chips de berenjena crujientes.
- → ¿Cómo se asan los melocotones para este plato?
Corta el melocotón en rodajas y ásalo en sartén o parrilla, un par de minutos por cada lado hasta dorar.
- → ¿El salmorejo debe servirse frío?
Sí, el salmorejo se sirve muy frío para resaltar su frescura y textura cremosa.
- → ¿Con qué se puede acompañar este salmorejo?
Ideal con pan tostado, vinagreta suave o una ensalada ligera para un menú veraniego.