
Este pollo asado con papas al ajo y limón se ha convertido en el plato estrella de mis cenas familiares dominicales. La combinación del exterior crujiente del pollo con las papas impregnadas de sabores cítricos crea una comida reconfortante que siempre deja a todos pidiendo más.
La primera vez que preparé este plato fue durante una reunión improvisada con amigos. Estaba nerviosa por servir algo tan sencillo, pero cuando vi sus caras de satisfacción al probar el primer bocado, supe que había encontrado una receta para guardar por siempre.
Ingredientes
- Pollo entero de aproximadamente 1.6 a 1.8 kg: proporciona la base perfecta para este plato familiar y desarrolla una piel dorada y crujiente
- Aceite de oliva: aporta sabor mediterráneo y ayuda a lograr esa piel crujiente que todos adoramos
- Sal y pimienta negra recién molida: realzan todos los sabores naturales del pollo y las papas
- Pimentón: añade un sutil color rojizo y un sabor ligeramente ahumado que complementa el pollo
- Limón entero: el ácido cítrico dentro del pollo lo mantiene jugoso mientras cocina
- Dientes de ajo aplastados: infunden el pollo desde adentro con un aroma irresistible
- Ramitas de romero o tomillo fresco: aportan notas herbáceas aromáticas que perfuman toda la carne
- Papas Yukon Gold o cerosas cortadas en cuartos: estas variedades mantienen su forma y absorben maravillosamente los sabores
- Ajo picado: crea una base de sabor profundo para las papas
- Jugo y ralladura de limón: añaden brillo y frescura a las papas contrastando con la riqueza del pollo
- Orégano seco: aporta un clásico sabor mediterráneo que combina perfectamente con el limón
Instrucciones Paso a Paso
- Precalentar el horno:
- Calienta el horno a 200°C. Es importante alcanzar esta temperatura antes de introducir el pollo para garantizar una cocción uniforme y lograr ese exterior crujiente que tanto nos gusta.
- Preparar el pollo:
- Seca completamente el pollo con toallas de papel. Este paso es crucial para obtener una piel crujiente. Frota todo el exterior con aceite de oliva asegurándote de cubrir cada rincón. Luego, sazona generosamente el exterior y la cavidad con sal, pimienta y pimentón, distribuyendo las especias de manera uniforme con tus manos.
- Rellenar el pollo:
- Introduce el limón cortado por la mitad, los dientes de ajo aplastados y las hierbas frescas dentro de la cavidad del pollo. Este relleno aromático infundirá sabor desde el interior mientras se cocina. Si tienes hilo de cocina a mano, ata las patas juntas para mantener la forma durante la cocción.
- Preparar las papas:
- En una bandeja grande para asar, mezcla las papas con aceite de oliva, ajo picado, jugo y ralladura de limón, orégano, sal y pimienta. Asegúrate de que cada trozo quede bien cubierto con esta mezcla aromática para maximizar el sabor.
- Colocar el pollo y asar:
- Haz un hueco en el centro de las papas y coloca allí el pollo con la pechuga hacia arriba. Esta disposición permite que los jugos del pollo se mezclen con las papas mientras se cocinan. Hornea durante 1 hora y 10 minutos, removiendo las papas una o dos veces durante la cocción para que se doren uniformemente.
- Comprobar la cocción:
- El pollo estará listo cuando alcance una temperatura interna de 74°C en la parte más gruesa de la pechuga o el muslo. Usa un termómetro de carne para estar seguro. La piel debe estar dorada y crujiente, y las papas tiernas por dentro y crujientes por fuera.
- Reposar y servir:
- Deja reposar el pollo durante 10 minutos antes de trincharlo. Este tiempo de reposo es esencial para que los jugos se redistribuyan por toda la carne. Sirve el pollo trinchado junto con las papas asadas y rocía con los jugos de la bandeja para un sabor adicional.

Este plato me recuerda a las cenas dominicales en casa de mi abuela. Ella siempre insistía en utilizar un pollo de corral y decía que el secreto estaba en frotar la piel con mantequilla antes de cocinar. He adaptado su receta a lo largo de los años, pero el aroma que invade la casa mientras se cocina sigue transportándome a aquellas tardes felices.
Consejos Para Papas Perfectas
Las papas son casi tan protagonistas como el pollo en esta receta. Para conseguir el mejor resultado, córtalas en trozos de tamaño similar para que se cocinen uniformemente. Si tienes tiempo, déjalas en agua fría durante 30 minutos antes de cocinar y sécalas bien. Esto elimina parte del almidón y ayuda a que queden más crujientes. Durante la cocción, no tengas miedo de removerlas varias veces para que se doren por todos lados.
Variaciones Deliciosas
Esta receta es muy versátil. Puedes añadir zanahorias, cebollas rojas o incluso calabaza cortada en cubos junto con las papas. Para un toque diferente, prueba a sustituir el limón por naranja, que aporta un sabor más dulce. También funciona maravillosamente con especies como el za'atar o la mezcla de especias ras el hanout para un giro hacia la cocina del Medio Oriente. En verano, me gusta añadir hierbas frescas como albahaca o perejil justo antes de servir.
Almacenamiento y Aprovechamiento
Las sobras se conservan perfectamente en el refrigerador durante 3-4 días en recipientes herméticos. Para recalentar, utiliza el horno a 180°C durante unos 15 minutos para mantener la textura crujiente. Con los restos de pollo puedes preparar deliciosas ensaladas, sándwiches o incluso añadirlo a una sopa. Y no descartes los huesos. Guárdalos en el congelador hasta que tengas suficientes para hacer un caldo casero lleno de sabor que servirá de base para futuras sopas y guisos.
Historia Del Plato
El pollo asado con papas es un plato que trasciende fronteras, pero esta versión con ajos y limón tiene fuertes raíces mediterráneas, especialmente en la cocina griega. Tradicionalmente, se utilizaban los ingredientes disponibles localmente: pollo de corral, aceite de oliva prensado en frío, limones frescos y hierbas aromáticas que crecían en abundancia. Era común prepararlo los domingos cuando toda la familia se reunía mientras el pollo se cocinaba lentamente en hornos de leña comunitarios. Hoy mantenemos esa esencia pero adaptada a nuestras cocinas modernas.

Preguntas y respuestas sobre la receta
- → ¿Puedo preparar este pollo con anticipación?
Sí, puedes sazonar el pollo y preparar las papas con hasta 24 horas de antelación. Guárdalos por separado en recipientes herméticos en el refrigerador. Saca todo 30 minutos antes de cocinar para que alcance temperatura ambiente, lo que garantiza una cocción más uniforme.
- → ¿Qué puedo usar si no tengo romero fresco?
El tomillo o mejorana son excelentes alternativas al romero. También puedes usar romero seco (reduce la cantidad a 1/2 cucharadita) o una mezcla de hierbas provenzales para mantener el perfil mediterráneo del plato.
- → ¿Cómo sé si el pollo está completamente cocinado?
El pollo está listo cuando alcanza una temperatura interna de 74°C (165°F) en la parte más gruesa del muslo, sin tocar el hueso. Si no tienes termómetro, pincha la parte gruesa del muslo - los jugos deben salir claros, no rosados.
- → ¿Puedo usar piezas de pollo en lugar de un pollo entero?
Sí, puedes usar muslos, contramuslos o pechugas con hueso y piel. Ajusta el tiempo de cocción: las piezas suelen requerir 35-45 minutos dependiendo de su tamaño. Mantén la temperatura del horno y verifica la cocción con un termómetro.
- → ¿Cómo puedo conseguir una piel más crujiente?
Para una piel extra crujiente, seca muy bien el pollo antes de sazonarlo y asegúrate de que el horno esté completamente precalentado. También puedes colocar el pollo bajo el grill durante los últimos 3-5 minutos de cocción, vigilando atentamente para evitar que se queme.
- → ¿Este plato se puede congelar?
El pollo cocido se puede congelar hasta por 3 meses. Las papas tienden a cambiar de textura al congelarse, así que es mejor consumirlas frescas. Para recalentar el pollo congelado, descongélalo completamente en el refrigerador y caliéntalo en el horno a 160°C hasta que esté bien caliente.