Guardar Esta tapa de espinacas y garbanzos es un clásico que nunca defrauda para empezar una comida o improvisar una cena ligera con sabor español. Con su mezcla de especias aromáticas y ese toque inconfundible de pimentón, resulta perfecta cuando buscas algo reconfortante y saludable pero no quieres perder tiempo en la cocina.
La primera vez que la preparé fue para aprovechar un resto de espinacas frescas y desde entonces nunca falta en reuniones familiares Mi hermana siempre insiste en llevarse el tupper con las sobras porque dice que está aún mejor al día siguiente
Ingredientes
- Aceite de oliva virgen extra: dos cucharadas aporta cremosidad y sabor potente escoge uno de calidad para un mejor resultado
- Ajo: tres dientes laminados la clave de un fondo aromático usa ajos firmes sin brotes
- Cebolla amarilla pequeña: bien picada suaviza la mezcla y aporta dulzor fíjate que tenga piel tersa
- Espinacas frescas: doscientos gramos o congeladas bien escurridas dan color y textura las más verdes son las mejores
- Garbanzos cocidos: cuatrocientos gramos proporcionan cremosidad y proteína usa legumbres tiernas sin piel dura
- Pimentón ahumado: una cucharadita esencial para ese sabor típico elige uno español
- Comino molido: media cucharadita aporta aroma terroso
- Copos de chile: un cuarto de cucharadita opcional le da un toque picante
- Sal y pimienta negra: al gusto realzan el sabor
- Passata de tomate: dos cucharadas añade jugosidad
- Agua: dos cucharadas para ligar la salsa
- Vinagre de Jerez: una cucharada aporta un contraste ácido si no tienes sirve vinagre de vino tinto
- Perejil fresco picado: para decorar debe estar brillante y aromático
- Limón en gajos: para servir resalta todos los ingredientes con su frescor
Instrucciones
- Saltear los aromáticos:
- Calienta el aceite de oliva en una sartén grande a fuego medio Añade el ajo y la cebolla Sofríe removiendo con una cuchara de madera durante entre tres y cuatro minutos hasta que la cebolla esté transparente y el ajo suelte su fragancia sin dorarse
- Sazonar con especias:
- Incorpora el pimentón ahumado el comino y los copos de chile si los usas Remueve todo durante treinta segundos para que las especias suelten sus aromas y no se quemen
- Agregar el tomate:
- Añade la passata de tomate junto con dos cucharadas de agua Lleva la mezcla a punto de hervor removiendo para que todo se integre
- Incorporar los garbanzos:
- Vuelca los garbanzos cocidos y escurridos en la sartén Cocínalos durante entre dos y tres minutos mezcla bien para que se impregnen con la salsa y absorban los sabores
- Sumar la espinaca:
- Agrega la espinaca fresca poco a poco en tandas dejando que se marchite con el calor Si usas espinaca congelada añádela toda de golpe y cocina hasta que se caliente bien y el exceso de agua se evapore
- Ajustar y perfumar:
- Salpimienta al gusto Incorpora el vinagre de Jerez o de vino tinto Mezcla durante un minuto más esto da equilibrio fresco a la receta
- Final y presentación:
- Retira la sartén del fuego Espolvorea con perejil picado y rocía un poco de jugo de limón Sirve inmediatamente con pan tostado o como parte de una mesa de tapas
Guardar Me fascina ese aroma que sale de la sartén cuando el pimentón y el ajo se funden con el aceite de oliva Siempre me transporta a los bares de Sevilla La receta nació de los intentos de mi abuela por meter más verduras en nuestra dieta y terminó convertida en una favorita de todas las generaciones
Consejos de conservación
Este plato se guarda muy bien en un recipiente hermético dentro de la nevera durante hasta tres días Si quieres prepararlo con antelación guárdalo sin la decoración de perejil y limón Agrégala justo antes de servir para mantener la frescura
Sustituciones de ingredientes
Si no tienes garbanzos puedes usar alubias blancas o lentejas El pimentón ahumado es clave pero si te falta puedes probar con un poco de pimentón dulce mezclado con una pizca de comino extra El vinagre de manzana sirve también en caso de apuro
Sugerencias para servir
Es delicioso con pan tostado de pueblo o como relleno de tortillas para una comida rápida Queda genial como parte de una mesa de tapas junto con aceitunas patatas bravas y queso manchego A algunos familiares les encanta añadir un huevo frito encima para hacerlo un plato principal más contundente
Guardar Preparar esta receta te convertirá en héroe de tus reuniones familiares y no dejarás ni rastro en la fuente. Prueba añadir ralladura de limón para darle un giro fresco antes de servir.
Preguntas frecuentes sobre recetas
- → ¿Se pueden usar espinacas congeladas?
Sí, puedes emplear espinacas congeladas previamente descongeladas y escurridas; solo debes agregarlas y calentarlas bien antes de mezclar.
- → ¿Qué tipo de vinagre es recomendable?
El vinagre de jerez aporta un sabor más auténtico, pero también puedes utilizar vinagre de vino tinto sin problema.
- → ¿Cómo intensificar el sabor?
Añade un poco más de pimentón ahumado, chili o incluso unas almendras tostadas para mayor profundidad en el resultado.
- → ¿Es una opción apta para dietas especiales?
Es apta para vegetarianos, no contiene gluten ni lácteos. Verifica ingredientes al elegir conservas y especias.
- → ¿Se puede preparar con antelación?
Sí, puedes prepararla con horas de anticipación y servir fría o templada. Los sabores incluso se potencian al reposar.
- → ¿Con qué acompañar estas tapas?
Combínalas con pan tostado, picos, aceitunas o como parte de una variedad de tapas mediterráneas.