
La tarta de manzana invertida con toque de canela y jengibre es un postre fácil, reconfortante y lleno de aromas. Esta versión lleva un giro especiado que transforma lo clásico en algo sorprendente, ideal para quienes buscan sorprender sin complicaciones. Si tienes manzanas en casa y unas pocas especias, tienes el éxito asegurado.
La primera vez que la probé, el aroma que inundó la cocina me hizo sentir que estaba preparando algo realmente especial. Me encanta cómo el dorado de las manzanas contrasta con el perfume a especias.
Ingredientes
- Lámina de masa de hojaldre: Fundamental para conseguir una base crujiente y ligera. Elige hojaldre de buena calidad, preferiblemente de mantequilla, aunque una versión vegana funciona igual de bien.
- Manzanas (tipo reineta o golden, 3 unidades): Las reinetas son ideales por su acidez, aunque las golden también aportan dulzura y textura suave. Elige frutas firmes y sin golpes para un mejor resultado final.
- Azúcar moreno (50 g): Aporta el color dorado y ese toque caramelizado tan característico. Si tienes azúcar de caña integral, también es una excelente elección.
- Mantequilla (30 g): Responsable de la untuosidad y sabor. Busca mantequilla fresca y sin sal. Se puede sustituir por mantequilla vegetal.
- Canela en polvo (1 cucharadita): Protagonista del aroma, realza el sabor de las manzanas.
- Jengibre en polvo (1/2 cucharadita): El toque especiado diferente que le da calidez y un matiz especial.
Instrucciones
- Paso uno:
- Precalentar el horno a 200 °C para que alcance la temperatura adecuada y el hojaldre suba perfectamente.
- Paso dos:
- Derrite la mantequilla en una sartén a fuego medio. Añade el azúcar, la canela y el jengibre; mezcla un minuto hasta que el azúcar comience a disolverse. Incorpora los gajos de manzana, remueve y deja caramelizar durante 10 minutos sin descuidar para evitar que se pegue.
- Paso tres:
- Distribuye las manzanas caramelizadas en la base de un molde redondo o una sartén apta para horno; extiende bien para cubrir todo el fondo.
- Paso cuatro:
- Coloca la lámina de hojaldre sobre las manzanas, ajustando los bordes hacia el interior del molde para sellar bien y que el jugo permanezca dentro durante la cocción.
- Paso cinco:
- Lleva al horno y cocina entre 20 y 25 minutos, hasta que el hojaldre esté firmemente dorado y crujiente. No abras el horno antes de tiempo.
- Paso seis:
- Deja reposar fuera del horno unos minutos. Después, coloca un plato grande encima y dale la vuelta con cuidado para desmoldar la tarta. Ten paciencia: este paso revela las preciosas manzanas caramelizadas.

Esta tarta fue uno de los postres favoritos en mi última reunión familiar, todos preguntaron por el toque de jengibre, que hace la diferencia. La mantequilla dorada entre las manzanas genera un caramelo que queda en la memoria.
Consejos para Almacenar
Guárdala en un recipiente hermético en la nevera hasta tres días. Si te gusta templada, caliéntala suavemente en el horno o en microondas antes de servir. Evita congelar después de hornear, ya que la textura del hojaldre se puede alterar, pero puedes preparar las manzanas caramelizadas con antelación y guardarlas en frío.
Sustituciones de Ingredientes
El hojaldre puede ser sin gluten o vegano si es necesario, solamente asegúrate de que sea de buena calidad. Puedes usar peras en vez de manzanas en temporada y alterar la combinación de especias: añade clavo o cardamomo si buscas aún más intensidad.
Sugerencias para Servir
Sirve recién hecha, aún tibia, con una bola de helado de vainilla o un poco de yogur natural. Otro toque delicioso es espolvorear con nueces tostadas o acompañar con alguna salsa ligera de caramelo o un chorrito de nata líquida.
Contexto Cultural e Histórico
La tarta de manzana invertida —inspirada en la famosa Tarte Tatin francesa— nació de un descuido culinario. Las hermanas Tatin invirtieron la tarta por error y así crearon este clásico. Las especias como la canela y el jengibre se agregan en versiones modernas para avivar el sabor, especialmente en otoño e invierno.
Adaptaciones Estacionales
En primavera y verano, prueba con manzanas verdes o melocotones para una versión más fresca. En otoño, apuesta por peras, membrillo o incluso calabaza cortada fina, adaptando consigo las especias.

Preparar una tarta de manzana invertida con canela y jengibre es abrirle la puerta al placer sencillo, con la satisfacción de ver cómo unos ingredientes humildes se transforman en algo extraordinario. Nadie se resiste a su aroma y, una vez la pruebas, se convierte fácilmente en un postre recurrente en casa.
Preguntas frecuentes sobre recetas
- → ¿Qué tipo de manzanas es mejor usar?
Las manzanas tipo reineta o golden son ideales por su textura y sabor, pero puedes probar otras variedades dulces y ácidas.
- → ¿Cómo evitar que el hojaldre quede húmedo?
Carameliza bien las manzanas y retira el exceso de líquido antes de colocar la masa para lograr un hojaldre dorado y crujiente.
- → ¿Se puede preparar con antelación?
Sí, puedes prepararla unas horas antes y recalentarla brevemente en el horno antes de servir para mantener la textura.
- → ¿Con qué acompañar la tarta?
Va genial con helado de vainilla, yogur natural o incluso un poco de nata montada.
- → ¿Puedo adaptar la tarta para dietas sin gluten o sin lácteos?
Sí, utiliza hojaldre sin gluten y mantequilla vegetal para que sea apta para intolerantes.