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Una escalivada cálida y otoñal es el plato perfecto para sorprender en una comida especial o aprovechar lo mejor de la temporada. Combinando berenjenas asadas al carbón y peras apenas caramelizadas con queso de cabra curado y un toque meloso de miel de tomillo, este es un plato sofisticado y fácil que equilibra sabores dulces, ahumados y salados. Resulta ideal como tapa elegante o ensalada tibia para quienes buscan una versión creativa de la tradicional escalivada catalana.
Recuerdo la primera vez que preparé esta versión para una reunión familiar de otoño y todos admiraron los aromas y colores. Ahora cada vez que veo berenjenas en el mercado sé que pronto disfrutaré este plato reconfortante.
Ingredientes
- Berenjenas grandes: dos unidades, aportan textura carnosa y el sabor ahumado esencial. Elige piezas firmes y pesadas.
- Peras maduras pero firmes: dos unidades, las peras deben ceder un poco al presionarlas pero sin estar blandas.
- Mantequilla: una cucharada, da untuosidad al caramelizar las peras. Busca mantequilla de buena calidad para mejor sabor.
- Azúcar moreno: una cucharadita, resalta el dulzor de la fruta sin empalagar. Prefiere azúcar sin refinar si es posible.
- Queso de cabra curado: cien gramos tipo Garrotxa, agrega intensidad y textura. Busca piezas con corteza natural y aroma a campo.
- Miel de tomillo: dos cucharadas, se recomienda de flores silvestres por su perfume herbal.
- Hojas frescas de tomillo: para rematar y aportar frescura. Corta justo antes de usarlas para mantener el aroma.
- Aceite de oliva virgen extra: dos cucharadas, fundamental para realzar todos los sabores. Utiliza uno con perfil afrutado.
- Sal y pimienta: al gusto. Elige sal marina gruesa y pimienta negra recién molida.
Paso a paso
- Asar la berenjena:
- Coloca las berenjenas enteras con la piel pinchada sobre la bandeja del horno bajo el grill muy caliente o sobre brasas si tienes barbacoa. Asa durante veinticinco a treinta minutos dándoles la vuelta varias veces hasta que toda la piel esté ennegrecida y el centro se note blando al pincharlo. Retira, deja templar y pélalas delicadamente. Corta en tiras gruesas y adereza con una parte del aceite de oliva, sal y pimienta.
- Caramelizar las peras:
- Mientras las berenjenas se asan, derrite la mantequilla en una sartén a fuego medio. Añade las peras peladas y cortadas en láminas de grosor medio y espolvorea el azúcar moreno por encima. Cocina cinco a siete minutos dándoles la vuelta solo una vez hasta que estén doradas y con bordes apenas caramelizados. Retira del fuego y reserva.
- Montar la escalivada:
- Extiende las tiras de berenjena todavía tibias sobre una fuente un poco profunda para que retengan el calor y jugos. Coloca encima las láminas de pera, intercalando para que cada bocado tenga fruta y hortaliza.
- Añadir el queso de cabra:
- Desmorona el queso curado con los dedos o un tenedor y espárcelo generosamente por encima de la mezcla aún caliente. El queso comenzará a fundirse ligeramente.
- Terminar y servir:
- Rocía todo con la miel de tomillo, muévelo delicadamente para distribuir bien el sabor. Añade las hojitas de tomillo fresco justo antes de llevar a la mesa y sirve inmediatamente mientras aún está tibio.
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Debes saber
- Aporte alto de fibra y antioxidantes
- El queso de cabra aporta proteína de calidad y sabor intenso
- La miel de tomillo resalta sabiamente la dulzura de la pera
- Plato apto para dietas vegetarianas y sin gluten
Siempre me ha fascinado el queso Garrotxa por su sabor profundo con notas de montaña. Es el ingrediente que transforma este plato y cada vez que lo pruebo me recuerda excursiones otoñales en el campo con mi familia. No hay nada como ver cómo el calor suaviza el queso justo al servir.
Consejos de conservación
Este plato se disfruta más recién hecho pero si te sobra puedes guardarlo en un recipiente hermético en la nevera hasta dos días. Antes de servir, calienta ligeramente las berenjenas y peras en el microondas o a fuego bajo para que recobren su textura y aroma.
Sustituciones de ingredientes
Si no encuentras peras puedes usar higos frescos o manzanas firmes para variar el dulzor. El queso de cabra Garrotxa puede sustituirse por otro queso curado de cabra e incluso por queso feta si deseas un sabor más salado. Para una versión vegana, utiliza sustituto vegetal de mantequilla y prescinde del queso o recurre a versiones vegetales.
Sugerencias para servir
Sirve como tapa templada con pan rústico tostado para una comida informal o como plato principal ligero junto a una ensalada verde. También puedes añadir frutos secos tostados como nueces o avellanas por encima para un toque crujiente o acompañarlo con un vino blanco seco catalán.
Contexto cultural de la receta
La escalivada es un clásico catalán elaborado tradicionalmente con berenjena, pimientos y cebolla asados. Esta versión fusiona la cocina tradicional con el aire otoñal y la elegancia de combinar fruta y queso como homenaje a las mesas familiares catalanas y a la creatividad culinaria española.
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Preguntas y respuestas sobre la receta
- → ¿Qué queso de cabra es recomendable usar?
El queso de cabra curado español, como Garrotxa, aporta textura y sabor intensos. Puede usarse otro similar si no está disponible.
- → ¿Es necesario asar la berenjena en parrilla?
La parrilla realza el sabor ahumado, pero también se puede utilizar horno para obtener una textura tierna y piel caramelizada.
- → ¿Puedo sustituir las peras por otra fruta?
Sí, los higos resultan una excelente opción para variar el sabor y aportar una nota más dulce e intensa.
- → ¿Cómo lograr una presentación atractiva?
Presenta las tiras de berenjena y peras intercaladas, espolvorea el queso y decora con miel y tomillo fresco justo antes de servir.
- → ¿Qué opciones hay para añadir textura?
Agrega nueces o avellanas tostadas para dar un contraste crujiente y enriquecer el perfil del plato.
- → ¿La preparación es apta para celíacos?
Sí, es naturalmente libre de gluten, excepto si se acompaña con pan, en cuyo caso debe ser pan sin gluten.