
Esta crema catalana con toque de naranja es la versión más vibrante y perfumada de uno de los postres clásicos españoles Cada cucharada combina la suavidad de la crema infusionada con canela y vainilla y el frescor cítrico de la naranja Todo bajo una costra caramelizada que cruje en la boca Es perfecta para aprovechar la temporada de cítricos y sorprender con un giro moderno a una receta tradicional de toda la vida
La primera vez que la preparé fue en una cena familiar en enero y todos quedaron intrigados preguntando por ese toque especial de naranja Desde entonces nadie quiere crema catalana sin ese perfume tan mediterráneo
Ingredientes
- Leche entera: da cremosidad y ayuda a infusionar los aromas Elige leche fresca para mejor sabor
- Yemas de huevo: aportan color intenso y textura firme Busca huevos frescos de corral para cremosidad
- Azúcar: endulza la crema y crea la capa crujiente encima Si quieres un caramelo perfecto usa azúcar blanco fino
- Maicena: espesa la crema sin restar suavidad Opta por maicena pura para una textura lisa
- Canela en rama: infunde el postre con su aroma cálido y tradicional Siempre usa canela en rama para mejor sabor
- Piel de naranja: da un matiz floral y fresco Usa naranjas firmes y bien perfumadas Lava bien antes de pelar
- Piel de limón: aporta acidez y equilibra los aromas Elige limones sin ceras ni tratamientos
- Extracto de vainilla: profundiza la fragancia de la crema Si tienes acceso a vainas naturales mejor aún
Instrucciones paso a paso
- Infusionar los aromas:
- Coloca la leche en un cazo junto con la rama de canela la piel de naranja la piel de limón y la vainilla Calienta a fuego medio controlando que no hierva Retira del fuego justo antes de alcanzar el hervor coloca una tapa y deja reposar al menos diez minutos así la leche absorbe todas las esencias
- Batir yemas y azúcar:
- En un bol mezcla las yemas de huevo con el azúcar Bate hasta obtener una mezcla ligera casi blanquecina y cremosa Incorpora la maicena batiendo hasta que desaparezcan los grumos Una mezcla lisa es fundamental para una crema fina
- Templar y espesar:
- Retira las pieles y la canela de la leche infusionada Calienta de nuevo la leche sin dejar que hierva Vierte en forma de hilo la mitad de la leche sobre las yemas mientras bates constantemente Esto previene que las yemas se cocinen de golpe Vuelve a unir la mezcla de yemas y leche con el resto de la leche en el cazo y cocina a fuego medio bajo Remueve sin parar hasta que la crema espese y adquiera cuerpo cubriendo el dorso de la cuchara Este paso puede tomar unos minutos la paciencia es clave
- Colar y enfriar:
- Retira del fuego pasa la crema por un colador y repártela en recipientes individuales de barro o ramequines Deja enfriar al ambiente y luego lleva al frigorífico al menos dos horas así la crema se compacta y desarrolla su textura característica
- Caramelizar y servir:
- Espolvorea azúcar fina de manera uniforme sobre cada porción Utiliza un soplete de cocina para quemar el azúcar y lograr esa capa dorada y crocante Si no tienes soplete usa el grill del horno por unos segundos Vigila bien para evitar que se queme Deja reposar un minuto antes de servir

Debes saber
Es un postre alto en calcio y proteínas La puedes dejar lista con un día de antelación El caramelo debe hacerse justo antes de servir La piel de naranja fresca transforma completamente el resultado Cada vez que la añado me transporta a los naranjales de mi infancia en invierno Preparar esta crema con mi abuela siempre fue pura alegría especialmente cuando me dejaba romper la costra de azúcar con la cuchara y escuchar ese crujido
Consejos de conservación
Guarda la crema ya reposada y sin caramelizar tapada en el frigorífico hasta por tres días No le pongas el caramelo hasta el momento de servir para evitar que se ablande la costra Si te sobra crema ya caramelizada consume en las siguientes horas para mantener la textura ideal
Sustituciones de ingredientes
Para un matiz aún más aromático prueba usando ralladura de mandarina en otoño Si no tienes extracto de vainilla puedes usar una vaina y raspar las semillas Puedes usar leche vegetal entera aunque el sabor será algo distinto
Ideas para servir
Sirve la crema catalana en cazuelitas de barro para un toque tradicional Acompaña con gajos de naranja fresca para resaltar el sabor cítrico Decora con un poco de ralladura extra de naranja para un perfume intenso
Contexto cultural e historia
La crema catalana es una joya de la repostería española especialmente ligada a la festividad de San José el diecinueve de marzo Su origen es anterior a la famosa crème brûlée francesa El uso de piel de cítricos aprovecha los productos de temporada y brinda armonía entre tradición e innovación

Preguntas frecuentes sobre recetas
- → ¿Por qué se utiliza piel de naranja en esta versión?
Aporta un aroma fresco y cítrico que realza el sabor clásico y combina perfectamente con la canela y la vainilla.
- → ¿Se puede sustituir la naranja por otro cítrico?
Sí, es posible usar piel de mandarina para un toque más suave, o limón para mantener la versión tradicional.
- → ¿Qué leche se recomienda para una textura óptima?
La leche entera brinda una textura más cremosa y densa, ideal para postres como la crema catalana.
- → ¿Cómo lograr la costra crujiente perfecta?
Espolvorea azúcar y quema con soplete o grill muy fuerte justo antes de servir, para mantener la capa bien crujiente.
- → ¿Cuánto tiempo debe enfriarse antes de añadir el caramelo?
Al menos 2-3 horas en refrigerador, así la crema toma cuerpo y el caramelo no se derrite.