
Este dulce manjar de polvorones de almendras y miel ha sido parte de mis celebraciones festivas desde que aprendí la receta de mi abuela española. La combinación de almendras tostadas y el toque sutil de miel transforma estas galletas tradicionales en algo verdaderamente especial.
La primera vez que preparé estos polvorones fue durante las navidades cuando extrañaba los sabores de España. Desde entonces, se han convertido en una tradición familiar que todos esperan cada año. La satisfacción de ver cómo desaparecen de la bandeja es incomparable.
Ingredientes
Ingredientes secos
- Harina de trigo: 2 tazas Tostarla previamente realza el sabor y es esencial para la textura tradicional
- Almendras finamente molidas: 1 taza Las almendras tostadas aportan un sabor más profundo y aromático
- Canela molida: ½ cucharadita Añade calidez y complementa perfectamente las almendras
- Sal: ¼ cucharadita Equilibra la dulzura y realza todos los sabores
Ingredientes húmedos
- Mantequilla sin sal a temperatura ambiente: ¾ taza Asegúrate de que esté bien suave para conseguir la textura adecuada
- Azúcar glas: ⅓ taza Proporciona dulzura sin la textura granulada del azúcar regular
- Miel: 2 cucharadas Usa miel de flores para un sabor suave o de bosque para uno más intenso
- Extracto de vainilla: 1 cucharadita La vainilla de buena calidad marca la diferencia
Para espolvorear
- Azúcar glas: ½ taza Este recubrimiento final no es solo decorativo sino parte esencial de la experiencia
Instrucciones Paso a Paso
- Tostar la harina:
- Precalienta el horno a 175°C. Extiende la harina en una bandeja de hornear y tuéstala durante 8 a 10 minutos, removiendo una o dos veces, hasta que adquiera un tono ligeramente dorado. Este paso es crucial para el sabor auténtico. Deja enfriar completamente antes de usar.
- Preparar la mezcla seca:
- En un bol grande, mezcla la harina tostada ya enfriada, las almendras molidas, la canela y la sal. Asegúrate de que todos los ingredientes estén bien integrados para una textura uniforme.
- Crear la base cremosa:
- En otro bol, bate la mantequilla, el azúcar glas, la miel y el extracto de vainilla hasta conseguir una mezcla ligera y esponjosa. La textura debe ser muy suave y aireada, lo que llevará unos 3 a 4 minutos con batidora eléctrica.
- Formar la masa:
- Añade gradualmente los ingredientes secos a la mezcla de mantequilla, incorporándolos con movimientos envolventes. La masa parecerá desmenuzable pero debe unirse al presionarla. Si es necesario, amasa brevemente con las manos para unificarla.
- Estirar y enfriar:
- Coloca la masa entre dos hojas de papel de hornear y estírala hasta conseguir un grosor de aproximadamente 1,3 cm. Refrigera durante 15 minutos para que se afirme y sea más fácil cortarla.
- Cortar y hornear:
- Corta la masa en círculos o formas ovaladas tradicionales y colócalas en una bandeja forrada con papel de hornear. Hornea durante 12 a 15 minutos, hasta que los bordes apenas comiencen a dorarse.
- Enfriar con cuidado:
- Deja enfriar completamente las galletas en la bandeja de hornear, ya que son extremadamente frágiles cuando están calientes. La paciencia es clave en este paso.
- Dar el toque final:
- Una vez completamente frías, espolvorea generosamente con azúcar glas, asegurándote de cubrir toda la superficie. Este paso final no solo añade dulzura sino que es parte de la presentación tradicional.

Mi ingrediente favorito en esta receta es la almendra tostada. Recuerdo a mi abuela tostándolas en una sartén antes de molerlas, llenando la casa con un aroma incomparable. Este paso aparentemente pequeño es lo que distingue unos polvorones caseros excepcionales de unos ordinarios.

Consejos de Conservación
Los polvorones de almendra y miel se conservan perfectamente en un recipiente hermético a temperatura ambiente hasta por 2 semanas. Coloca papel de hornear entre las capas para evitar que se aplasten. Con el tiempo, los sabores se intensifican y la textura mejora ligeramente, por lo que son ideales para preparar con anticipación. Evita refrigerarlos ya que pueden absorber la humedad y perder su característico desmoronamiento.
Sustituciones Inteligentes
Si no puedes consumir almendras, las avellanas tostadas son una excelente alternativa que mantiene el espíritu de la receta. Para una versión sin lácteos, puedes usar margarina vegetal de buena calidad, aunque el sabor será ligeramente diferente. Si prefieres no usar miel, el sirope de arce puro funciona bien, aportando un matiz diferente pero igualmente delicioso. Para hacerlos sin gluten, una mezcla de harinas sin gluten con un poco de xantana puede funcionar, aunque la textura será algo diferente.
Historia y Tradición
Los polvorones tienen un origen árabe y se popularizaron en Andalucía durante la época medieval. Tradicionalmente se elaboraban para aprovechar la manteca de cerdo después de la matanza, aunque hoy en día se prefiere la mantequilla en muchos hogares. Su nombre proviene de "polvo", debido a su característica textura que se deshace al morderlos. En España, son imprescindibles durante las navidades, donde se envuelven individualmente en papel de seda de colores. Esta receta con almendras y miel representa una variación más refinada del polvorón tradicional.
Sugerencias para Servir
Los polvorones son el acompañamiento perfecto para un café espresso fuerte o un té negro aromático que contrarreste su dulzura. En España, se disfrutan frecuentemente con un vino dulce como el Moscatel o el Pedro Ximénez. Para una presentación elegante, colócalos en una bandeja de plata intercalados con hojas de laurel decorativas durante las fiestas. También funcionan maravillosamente como regalo gastronómico presentados en cajas bonitas con papel de seda, manteniendo la tradición española.
Preguntas y respuestas sobre la receta
- → ¿Puedo usar almendras sin tostar para hacer polvorones?
Sí, pero tostar las almendras antes de molerlas realza significativamente su sabor. Si usas almendras sin tostar, considera tostarlas en una sartén o en el horno durante 5-8 minutos hasta que estén fragantes y ligeramente doradas.
- → ¿Por qué se tuesta la harina para los polvorones?
La harina tostada aporta un sabor característico y una textura más liviana a los polvorones. Este paso tradicional es fundamental para conseguir el auténtico sabor y la textura desmenuzable que define a estas galletas españolas.
- → ¿Puedo sustituir la miel por otro endulzante?
Sí, puedes usar azúcar moreno o jarabe de arce como alternativas. Sin embargo, la miel aporta un sabor particular que complementa perfectamente las almendras. Si haces una sustitución, mantén las mismas proporciones para preservar la textura.
- → ¿Por qué mis polvorones se desmoronan demasiado?
Los polvorones son naturalmente desmenuzables, pero si se deshacen excesivamente, puede ser que necesiten más tiempo de horneado o que la mantequilla estuviera demasiado blanda. Asegúrate de dejarlos enfriar completamente antes de manipularlos, ya que son muy frágiles cuando están calientes.
- → ¿Cuánto tiempo se conservan los polvorones de almendras y miel?
Almacenados en un recipiente hermético a temperatura ambiente, estos polvorones se conservan hasta 2 semanas. De hecho, su sabor y textura suelen mejorar después del primer día, cuando los aromas se han asentado completamente.
- → ¿Estos polvorones son típicos de alguna región española en particular?
Los polvorones son especialmente populares en Andalucía, particularmente en la provincia de Sevilla, donde ciudades como Estepa son famosas por su producción. Son un dulce navideño tradicional en toda España, aunque se disfrutan durante todo el año.