01 -
Precalienta el horno a 220°C y forra un molde para muffins de 12 cavidades con círculos de papel pergamino o forros estilo tulipán para facilitar la extracción.
02 -
En un tazón grande, bate el queso crema y el azúcar hasta que esté suave y cremoso usando una batidora de mano o de pie a velocidad media.
03 -
Agrega los huevos uno a uno, batiendo bien después de cada adición.
04 -
Mezcla el extracto de vainilla y la sal.
05 -
Tamiza la harina sobre la mezcla y dóblala suavemente hasta que esté bien integrada.
06 -
Vierte la crema de leche y mezcla hasta obtener una masa uniforme y sedosa.
07 -
Divide la masa de manera uniforme entre las cavidades preparadas, llenando cada una a aproximadamente 3/4 de su capacidad.
08 -
Hornea durante 22-25 minutos o hasta que las superficies estén doradas y caramelizadas, pero los centros todavía tiemblen ligeramente al agitar.
09 -
Deja que los cheesecakes se enfríen en el molde durante 20 minutos, luego transfiérelos a una rejilla para enfriar completamente. Sirve a temperatura ambiente o ligeramente fríos.